miércoles, 11 de julio de 2012

La Frontera peligrosa de adormecer Generaciones


Creo que es limitada nuestra capacidad de entender profundamente,una Adicción,si no somos o hemos sido adictos.No obstante,me atrevo a seguir indagando (sin ser Semiólogo,Sicólogo,ni Sociologo) en las características y los comportamientos de lo que me animó llamar,a un potencial flagelo del Siglo XXI :
El Autismo Social,un estado de aislamiento profundo  con trastornos de las conductas,catalizadas por el ADITEC (Abuso de DIspositivos TEcnológicos de Comunicación).
En alguna entrada anterior,establecimos que esta adicción,no respeta edades y su virulencia suele ser más aguda a medida que las personas son más jóvenes.
Tanto es así,que en la Infancia del siglo que corre,muy probablemente el ADITEC se esté enquistando como verdadera epidemia,más,que en los Jóvenes y en estos aún más que en los Adultos  
Porque,estimo,que el ADITEC adquiere más virulencia,a medida que la capacidad de asombro,es mayor
Y en esto,sabemos que la Infancia,lleva la delantera,sobre cualquier otra etapa de la Vida.
Toda adicción de magnitud,en mi opinión,produce una enajenación en una o más facetas de la personalidad y contribuye en forma significativa a una falta de identidad,o sea que nos desconecta cada vez más de nuestra esencia como Ser Humano,erosionando nuestra capacidad de reacción hasta llevarnos a un estado quasi vegetativo.
Un niño,no se preguntará que le puede estar pasando,porque no ha madurado lo suficiente,para desarrollar su personalidad,con lo cual el perjuicio del ADITEC,será mucho más grave,el resto de su existencia.
En Jovenes y Adultos,podrán darse conductas donde la sensibilidad onírica se tergiverse y distorsione, confundiendo,la vigilia con los estados de ensoñación,lo que es real,con lo imaginado,a tal punto que la percepción sensorial se debilita y el adicto llega a restarle crédito o a descreer de sus propios sentidos.
Cuando esta lucha se hace muy intensa,afanosa y feroz,en una personalidad cada vez más debilitada…al principio se enfrenta la batalla con las pocas fuerzas que se tiene,pero después de un tiempo solo se procura
sumergirse en un estado de adormecimiento
Corremos el riesgo de adormecer a las generaciones,si el ADITEC continúa avasallando,la relación del Hombre con la Naturaleza.
Y en este contexto,las personas,adictas y debilitadas sicologicamente,serán presa fácil,de cualquier imposición externa,que tienda a manipularlas.